Respira. Juega. Confía

Antes de cada partido, hay un silencio que puede asustar o inspirar.

El cuerpo está tenso, el corazón late rápido, la mente piensa mil cosas al mismo tiempo. En NG enseñamos a nuestras jugadoras que ese momento no se vence con fuerza, sino con respiración.

La respiración profunda y consciente es la llave que abre el control emocional. Inhalar por la nariz, sostener tres segundos y exhalar lento por la boca permite que el cerebro reciba oxígeno y envíe un mensaje claro al cuerpo: “Estoy a salvo. Puedo concentrarme.”

Cada jugadora de alto rendimiento necesita su propio ritual de calma. Algunas visualizan el partido; otras escuchan música; otras rezan. Lo importante es detener el ruido interno antes de entrar a la cancha, para que la mente no juegue en contra. Cuando respiras, te reconectas con el presente. Y en el presente es donde ocurren los puntos que cambian la historia.

Respirar es entrenar la serenidad. Y la serenidad gana finales.

#RespiraJuegaConfía  #MenteFuerte #CoachingNG    



   

Regresar al blog